Seguramente alguna vez has estado a punto de salir de casa y de repente te has dado cuenta de que tu móvil está al 5%. Incluso si tienes un modelo superior con una batería grande, esta condición no durará mucho. La mayoría de nosotros asociamos la duración de la batería con su tamaño, pero la realidad es un poco diferente. En muchos casos, la carga rápida es más importante que la capacidad de la batería en sí. ¿Por qué? Aquí hay cinco razones:
1. Los teléfonos compactos todavía tienen una oportunidad
Los teléfonos grandes son populares principalmente por su batería de mayor tamaño. Pero honestamente. A menudo son incómodos, difíciles de manejar con una mano y no son ideales para viajar. Si los teléfonos compactos tuvieran una carga súper rápida, mucha gente se olvidaría de los modelos grandes. Sólo unos minutos en el outlet y ya estarás listo para unas cuantas horas más.
2. Menos tiempo en el enchufe
Un teléfono que se carga lentamente te obliga a sentarte junto a un tomacorriente o dejarlo conectado a un cable durante toda la noche. La carga rápida (30 W o más) acortará este tiempo a minimamá. Podrás meterte en la ducha y tendrás la mitad de la batería cargada cuando regreses. Las pausas de carga breves son mucho más prácticas que esperar una hora para una carga completa.
3. Tranquilidad en la carretera
Cuando viajamos la mayor preocupación es tener el teléfono muerto. Incluso si tienes una batería más grande, tarde o temprano se agotará y la carga lenta solo hará que tu viaje sea más difícil. Con una carga rápida, solo 15 minutos en una parada para tomar un café te darán energía para las próximas horas. No tienes que correr por el aeropuerto o la estación de tren con un cargador en la mano ni entrar en pánico mientras buscas un enchufe.
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4. Banco de energía como respaldo
La batería pequeña se puede reemplazar fácilmente con un banco de energía portátil. Pero la carga rápida es un parámetro fijo y el teléfono es más rápido que su maxSimplemente no puedes cobrar el máximo. Por eso es más importante invertir en un teléfono con una velocidad de carga más rápida que una batería más grande. Un teléfono con carga de 45 W y más rápida es una opción más práctica en el futuro que un modelo con una batería de 5 mAh que se carga a una velocidad de 000 W.
5. Protección contra la obsolescencia en el futuro
Hoy en día la gente conserva sus teléfonos durante períodos de tiempo más largos y el reemplazo no es tan frecuente. Y aunque la batería se degrada con el tiempo, la velocidad de carga sigue siendo la misma. Un teléfono con carga rápida será útil durante muchos años. Además, puedes venderlo fácilmente porque reemplazar la batería es más barato que comprar un dispositivo nuevo.